El Runasur es una iniciativa del Expresidente boliviano Evo Morales, hecha pública el pasado 25 de abril, constituye un “Proyecto geopolítico transnacional para dejar de lado a los Estados, su respectiva soberanía e independencia y desde luego los regímenes democráticos existentes” (Pronunciamiento de Excancilleres y Ex viceministros de RREE 10/12/21).
Ha establecido su sede central en Cochabamba- Bolivia y busca adherir a los doce países de la región, buscando atraer a diferentes movimientos sociales generando una lucha inexistente anticolonialista.
Inclusive han desarrollado un decálogo indigenista para gobernar en las Américas, en que entre otros puntos plantea el proceso de reconstrucción y refundación de los Estados, generando contradicciones entre los pueblos indígenas y el resto de la sociedad, rechazando los modelos socioeconómicos existentes, incentivando odios culturales y generando caos que podría terminar en violencia.
“Constituye el germen inicial de una nueva geopolítica continental antagónica a Occidente, tal como lo ha señalado Evo Morales en su convocatoria, calificándola de anticapitalista, antimperialista y anticolonialista, una ideología de este tipo reformula el marxismo leninismo en términos étnicos”, preocupación mencionada por el exministro Francisco Tudela en el diario el Comercio 05/12/21.
La osadía de este supuesto patriarca del indigenismo llegó al extremo el pasado 03 de noviembre desde Buenos Aires, cuando en una clara intromisión en los asuntos internos del Perú, anunció una próxima reunión de su colectivo en el Cusco el 20 y 21 de diciembre, sin mediar palabra del gobierno peruano, irrogándose esa libertad como si fuera dueño de nuestro país.
Ante estos hechos el 22 de noviembre la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso, publicó un pronunciamiento en que lo declaró “Persona Non Grata, por su negativo activismo político en el Perú y su evidente injerencia e intromisión en la agenda política, social y económica del gobierno, en claro perjuicio de los intereses del pueblo peruano; exhortando a las autoridades competentes que se prohíba su ingreso a nuestro país para estos propósitos”.
Posteriormente luego de un silencio de varios días y ante la presión de diferentes medios de prensa y respondiendo al Comunicado de Exministros y viceministros de RREE, anteriormente mencionado, el Ministerio de Relaciones Exteriores el 12 de diciembre en un comunicado, desmintió en forma categórica que exista alguna amenaza para la soberanía, independencia y seguridad nacional vinculada a la integridad territorial del Estado.
Esta aseveración fue inmediatamente contestada por el mismo grupo de diplomáticos mencionado en el primer párrafo, indicando que la convocatoria que se pretendía realizar en el Cusco “No constituye simplemente un cónclave de pueblos originarios, sino como consta en sus documentos, de un proyecto geopolítico trasnacional que busca constituir una América Plurinacional, mediante el reemplazo de las repúblicas por estados plurinacionales, gobernados por asambleas constituyentes originarias; reafirmando que se trata de un proyecto que constituye una amenaza a la soberanía, independencia y seguridad nacional”.
Otro pronunciamiento importante ha sido el de los Ex Altos Mandos de la Fuerzas Armadas el 11 de diciembre, donde inclusive indicaron que habría la intención de desmembrar a nuestro país con una nación aymara y lograr para Bolivia una salida soberana al Pacífico.
Afortunadamente ha sido cancelada la reunión en el Cusco ante la presión ciudadana, sin embargo, no debemos bajar la guardia.