Esta pandemia que nadie vislumbró ha destruido el milagro económico peruano,
admirado a nivel internacional, generando un aproximado de 40,000 fallecidos según
el Financial Times y según cifras oficiales del gobierno 13,384 hasta el Lunes 20 de
Julio.
El cese abrupto y total de las actividades económicas dispuesto por el gobierno,
inclusive en actividades que se desarrollan con distancia social, significó paralizar 127
meses de crecimiento contínuo registrados por el Instituto Nacional de Estadística e
Informática (INEI).
Las proyecciones oficiales del Banco Central de Reserva (BCR) pronostican una caída de
la producción entre Abril y Junio del 31.9% y para fin de año se pronostica una caída del Producto Bruto Interno (PBI) del 15%; así lo indica Roberto Abusada Presidente del Instituto Peruano de Economía (IPE), añade “La profusión de medidas populistas y la erosión del prestigio internacional del Perú, debido a flagrantes incumplimientos de contratos y otras trasgresiones a la Constitución, empiezan a causar grietas en los más fuertes pilares de la macroeconomía y a mellar el potencial crecimiento” (El Comercio9/7/20).
Con estos resultados y la pérdida de empleo que solo en Lima se sitúa en 2.3 millones
según el INEI, se da un retroceso muy fuerte en la lucha contra la pobreza, la que
podría subir del 21% de nuestra población en el año 2019 al 30% en el 2020, con el
consecuente aumento del 10% en la informalidad que podría llegar al 80% de la
Población Económicamente Activa (PEA), según diversos analistas.
En estas condiciones sin pena ni gloria cesa el Gabinete presidido por Vicente Zevallos,
que hizo oídos sordos con el aval del Presidente Martín Vizcarra, a múltiples aportes referidos a la no paralización total de la economía y a la estrategia para enfrentar la pandemia, que continúa haciendo dolorosos estragos en nuestra población, al no haberse acorralado el coronavirus.
Con esta crisis el Miércoles 15 de Julio juramentó un nuevo Gabinete presidido por
Pedro Cateriano, se produjeron cambios en 11 Ministerios, permaneciendo siete
Ministros del Gabinete anterior, rotando dos de cartera.
La tarea que deben enfrentar solo se puede lograr con un liderazgo que busque la
unidad a través de una visión estratégica, frenando la desconfianza, el populismo y el
radicalismo, dejando de lado rencores políticos absurdos; por su permanente
conflictividad hay muchas dudas que lo logre el Presidente del Consejo de Ministros.
Entre otros puntos este Gabinete debe evitar que nuestro PBI caiga en dos dígitos y
que la informalidad aumente, para lo cual se tienen que destrabar 57 mil millones de
dólares que están proyectados en minería y ponerlos en valor, reactivar nuestro
aparato industrial, tanto las empresas grandes, medianas y pymes, minimizando
trámites burocráticos que estáncomplicando los fines de diferentes Programas, entre otros: Reactiva Perú (60,000 millones de soles que se están inyectando en el sector productivo, con créditos a bajo costo), Suspensión Perfecta (85% de las solicitudes han sido rechazadas por el Ministerio de Trabajo, permite el cese temporal del trabajador sin pago de remuneración) y la reanudación de actividades económicas donde se tieneque reducir la tramitología.
Finalmente, en el aspecto sanitario tenemos que continuar extremando nuestras
medidas de cuidado personal, usando siempre mascarillas y manteniendo la distancia
social.